La presbicia, o también llamada vista cansada, es el proceso de envejecimiento del ojo en el que el cristalino pierde su flexibilidad y los músculos que contraen el cristalino se debilitan y como resultado, disminuye progresivamente su capacidad cambio, el cristalino deja de ser una lente que enfoca el lejos y el cerca, quedando fija para el enfoque de lejos, siendo imposible enfocar para ver objetos cercanos.
Cirugía de la presbicia: lentes intraoculares multifocales
La disminución de la capacidad para enfocar objetos cercanos, a veces acompañados también por fatiga ocular y dolor de cabeza, son los síntomas de la aparición de la presbicia o vista cansada, que suele debutar a partir de los 40 años.
No se puede prevenir, puesto que está ligada al envejecimiento, se puede paliar con el uso de gafas de cerca, pero hoy día sí puede tratarse, y de forma muy segura y eficaz con la implantación de lentes intraoculares multifocales.
Cada vez son más personas las que padecen lo que todos conocemos por vista cansada o presbicia pero, ¿sabemos bien por qué nos ocurre esto y qué posibles tratamientos existen en la actualidad para deshacernos de esa dependencia de las “gafas de cerca”?
¿Cómo se manifiestan los síntomas de la vista cansada?
A partir de los 40 años muchas personas sienten dificultad para enfocar con nitidez los objetos próximos y, de forma intuitiva, se alejan los objetos, libros, periódicos… Acciones tan cotidianas como pueden ser buscar un contacto en la agenda del móvil o leer la carta de un restaurante y necesitar las gafas para ver con claridad, evidencian la relación de dependencia que mantenemos con éstas.
¿Existe alguna forma de evitar su aparición?
La aparición de la vista cansada es irremediable. Al igual que envejece nuestra piel, también envejecen nuestros ojos, y con los años vamos perdiendo también capacidad de enfoque. Surge entonces la necesidad de utilizar gafas en visión próxima (“gafas de cerca”).
¿Se puede operar la presbicia?
Se ha intentado operar la presbicia con laser Eximer aplicado sobre la cornea, con resultados poco satisfactorios.
El tratamiento que se está llevando a cabo hoy día para la vista cansada o presbicia, es parecida a la cirugía de la catarata, al paciente se le sustituye el cristalino para implantar lentes intraoculares multifocales.
Se trata de una intervención sencilla, muy segura e indolora para el paciente , durante el proceso, que puede durar en torno a 20 minutos aproximadamente, al paciente se le sustituye el cristalino que ya no sirve para enfocar imágenes de cerca por una lente intraocular bifocal o trifocal (LIO) con la que el paciente conseguirá ver nítidamente, tanto de lejos como de cerca.
El procedimiento está diseñado de manera personalizada por el oftalmólogo según las necesidades visuales del paciente y las características anatómicas de sus ojos.
Se trata, por tanto, de una intervención que aporta una altísima seguridad al cirujano y al paciente, muy precisa y eficaz, y que está proporcionando magníficos resultados entre los pacientes, siendo técnica de elección y, cuando está adecuadamente indicada.
¿Qué ventajas ofrece este tipo de intervención?
La primera gran ventaja que podemos destacar es que se trata de una operación definitiva. La vista cansada se combate eficazmente.
Pero otra de las grandes ventajas que ofrece corregir la presbicia con lentes intraoculares es que los pacientes intervenidos por esta técnica evitaran, de manera adelantada, la intervención de cataratas en el futuro y, a su vez, los cambios de graduación que éstas mismas provocan sobre nuestros ojos (miopía, hipermetropía y/o astigmatismo).
¿Cuándo recupera la actividad normal el paciente que opta por este tratamiento?
En este tipo de intervención los pacientes salen del quirófano por su propio pie y, en la mayoría de los casos, recuperan su vida normal al día siguiente. Se trata de una operación sencilla, muy segura e indolora para el paciente.