En la cirugía de la catarata extraemos el cristalino de la bolsa en la que se encuentra (saco capsular) a través de una apertura que realizamos en la parte anterior de la misma. Este saco está sujeto por unos ligamentos llamados zonulares que mantienen el cristalino en una posición exacta justo detrás de la pupila. Tras extraer la catarata, implantamos la lente dentro del saco capsular aprovechando los ligamentos zonulares para que la lente quede en la misma posición donde estaba el cristalino. Trascurridos meses o años desde la cirugía de catarata la capsula posterior del saco capsular pierde transparencia, proliferan células y se opacifica.
Algunos pacientes operados de cataratas nos refieren si se puede ensuciar la lente intraocular o que si le podemos limpiar la lentilla porque ven peor que recién operados.
El deterioro visual que sufre el paciente no es debido a que se haya ensuciado la lente intraocular, ya que ésta permanecerá transparente e inalterable para siempre. Esto se debe a la opacificación de la cápsula posterior del cristalino.
¿Cuáles son los síntomas que puedo tener?
El paciente presenta una pérdida progresiva de la visión que le recuerda a cuando tuvo catarata, una pérdida en la sensibilidad al contraste, deslumbramientos y visión doble del ojo afectado con la opacificación capsular posterior.
¿Cómo se trata la opacificación capsular posterior y qué ocurre si no se trata?
El tratamiento es la capsulotomía con láser Yag. No existen fármacos ni otro tipo de tratamiento. De no tratarse, el paciente persistirá con los síntomas antes descritos.
¿En qué consiste la capsulotomía con Láser YAG?
La palabra capsulotomía significa “cortar la cápsula”. Lo que hacemos es concentrar, de manera muy precisa, la potencia del láser en un pequeño punto central de la cápsula posterior del cristalino donde se halla el tejido fibroso y dar un impacto con la luz láser produciendo una retracción de este tejido, lo que generará un pequeño agujero. Así, procederemos a efectuar varios disparos hasta agrandar este agujero, consiguiendo retirar la parte central de la capsula posterior, dejando libre el centro, que coincide con la óptica de la lente intraocular permitiendo que los rayos luminosos que pasan por el eje visual lleguen a la retina. La finalidad del tratamiento es recuperar la visión que se ha perdido por la opacificación de la cápsula posterior.
¿Es doloroso este procedimiento?
La cápsula y zonas de alrededor, como son el vítreo, la lente intraocular y el humor acuoso, no poseen terminaciones nerviosas, por lo que no existe sensación dolorosa. La capsulotomía con láser Yag la realizamos de forma ambulatoria, con anestesia tópica (gotas) para que el paciente no sienta ninguna molestia y empleamos una lente de contacto que se apoya sobre la córnea. Es un tratamiento indoloro.
¿Cuánto tiempo se tarda en recuperar la visión?
La recuperación de la agudeza visual ocurre en pocos días tras realizarse la capsulotomía, siempre y cuando no exista una patología previa en otras partes del globo ocular: alteraciones retinianas, patología del nervio óptico, glaucoma, retinopatía diabética, ojo vago, etc.
¿Es una solución definitiva?
Este método tiene la ventaja que no hay que volverlo a repetir, ya no pueden proliferar o migrar las células que tapan los rayos luminosos, porque no hay un tejido sólido sobre el que se puedan apoyar.